Precauciones en tu comunidad de vecinos ante el COVID-19

El incumplimiento de las medidas de seguridad contra el Covid-19 conlleva a un incremento de brotes, los cuales se están dando especialmente en ambientes distendidos como reuniones familiares o de amigos.

En ese sentido, en la actualización sobre la situación de los brotes por Covid-19 del 11 de febrero de este año, el Ministerio de Sanidad señalaba que los contagios en el ámbito social suponen en torno al 21% del total de positivos.

Pese a estar doblegando la curva de la tercera ola, la incidencia de contagios sigue siendo muy alta y la aparición de nuevas cepas nos invita a no confiarnos ni relajar las medidas. Conscientes de esto, desde Initial hemos desarrollado la campaña informativa “Por tu seguridad, por la seguridad de todos”, que recoge recomendaciones anti-Covid-19 para prevenir la presencia de este virus en estos escenarios en los que se corre un mayor riesgo, principalmente viviendas y comunidades de vecinos.

Precauciones en zonas de paso

Uso de la mascarilla en las zonas comunes 

El uso de las mascarillas es, desde hace más de un año, una de las principales medidas para reducir en gran medida el riesgo de contagio. Aunque no ofrece una protección completa frente al virus, -pues hay que completar su uso con el resto de medidas indicadas por las autoridades-, supone una barrera que disminuye el número de partículas que se quedan suspendidas en el aire y que respiramos.

Por esa razón, a la hora de relacionarse con personas ajenas al propio núcleo familiar, es importante llevar la mascarilla bien ajustada, tanto al entrar al portal, como mientras se use el ascensor y el resto de zonas comunes. 

Sube y baja por las escaleras, es más seguro y saludable

Tanto la OMS como el resto de organismos, instituciones y empresas expertos en materia sanitaria vienen advirtiendo desde hace un tiempo que el Covid-19 se transmite a través de aerosoles.

Teniendo esto en cuenta, se recomienda restringir al máximo posible la estancia en espacios cerrados o interiores y, por ende, reemplazar el uso del ascensor por las escaleras. De este modo, se evita entrar en contacto con las partículas que están presentes alrededor del elevador. Además, es una manera saludable de mantenernos en forma y hacer ejercicio. 

Desinfección diaria de las zonas comunes

Aunque durante los comienzos de la pandemia se incidía mucho en la limpieza de las superficies que pudieran haber estado en contacto con el virus, a día de hoy no hay consenso científico del contagio por esta vía. Recientemente, Ildefonso Hernández Aguado, portavoz de la Sociedad Española de Salud Pública, señalaba que “aunque no se descartan otras vías, la parte más importante de las transmisiones del coronavirus es por aerosoles”.

A pesar de ello, cuanta más prevención se tenga, menor será la probabilidad de contraer el virus. En ese sentido, recomendamos desinfectar diariamente las zonas comunes de la comunidad de vecinos, como el interior de los ascensores, los pasamos o los tiradores de las puertas, entre otras.

Precauciones dentro de casa

Higienización de manos

El lavado de manos ya era una acción importante para evitar infecciones antes del Covid, pero ahora lo es más que nunca, pues gracias a ello se previene la propagación del virus. Es una buena costumbre que se debería mantener siempre nada más entrar en casa y antes de tocar nada. Con tan solo 20 segundos y agua y jabón o, en su defecto, desinfectante de manos, es posible mantener el virus lejos de nosotros y de nuestro entorno. 

Uso de la mascarilla el máximo tiempo posible

Interactuar con personas ajenas al propio núcleo familiar puede suponer un riesgo para la salud. Esas personas, a su vez, se relacionan con otros núcleos, fomentando la circulación del virus de unos entornos a otros. Para reducir la transmisión aérea cuando se reciben visitas recomendamos, además de mantener la distancia de seguridad, llevar la mascarilla puesta el máximo tiempo posible y, tan solo desprenderse de ella cuando se vaya a beber o ingerir alimentos.

Ventilación diaria y frecuente

En Initial insistimos mucho en esta idea, dada la importancia de la renovación del aire y de mantener un ambiente lo más limpio posible de agentes patógenos, productos químicos, gases e, incluso, SARS-CoV-2, para evitar contagios. Ventilar de forma natural, dando prioridad al aire fresco externo y minimizando la recirculación, es la recomendación general para renovar el aire en espacios interiores. 

Los aerosoles y partículas que expulsamos con tan solo respirar, se multiplican cuanto más tiempo se permanezca en un mismo sitio. Por ese motivo, si la visita se prolonga, es necesario ventilar la casa cada hora durante al menos diez minutos.

Uso de purificadores de aire homologado o detectores de CO2

En la medida de lo posible, se debe promover la ventilación natural por encima de la artificial. Sin embargo, si esto no es posible se debe recurrir a la ventilación forzada, teniendo presente que se debe usar aire del exterior y no la recirculación de aire. Para ese fin, recomendamos la complementación de todas las medidas anteriores con la instalación de purificadores de aire con filtros HEPA (filtro de aire de partículas de alta eficiencia, por sus siglas en inglés).

Estos sistemas, que deberán estar homologados y provistos de filtros de nivel 13 -como mínimo-, pues tienen capacidad para filtrar el 99,99% de todas las partículas en suspensión, eliminan los contaminantes suspendidos en el entorno, al absorber el aire, desinfectarlo y devolverlo a la estancia libre de patógenos. Con ellos se consigue una higienización integral del ambiente que respiramos, al eliminar no solo el Covid-19, sino también malos olores, agentes químicos, polvo, parásitos, bacterias, humedad, etc.

Como sabemos, el CO2 generado por la respiración de las personas tiende a incrementarse en espacios interiores. El nivel de CO2 del aire exterior es de 400 ppm (partes por millón), y un valor entre 500 ppm y 700 ppm en interiores se considera aceptable. Si la concentración de CO2 sobrepasa las 1.000 ppm, es signo de una mala ventilación, urgiendo la ventilación al máximo y lo antes posible.

A fin de conocer las condiciones de ventilación de un espacio, en Initial hemos desarrollado una herramienta para medir la concentración de CO2. Introduciendo datos como el tamaño del habitáculo, los ocupantes y las posibilidades de airear la sala, esta calculadora marca si la ventilación es la adecuada o si, por el contrario, es deficitaria y en ese caso se requiere de una mayor y frecuente aireación o, en casos extremos, el uso de un equipo purificador de aire.   

Aun siendo trágicos los datos, todo indica que vamos por el buen camino. Ahora, más que nunca, es importante seguir cumpliendo todas las medidas preventivas para ganarle la batalla al Covid-19. Mantener tu vivienda y tu comunidad de vecinos libre de virus es velar por tu seguridad y por la seguridad de todos.